El 21 de diciembre es uno de los días más importantes del año a nivel astrológico marcado por la conjunción de Saturno y Júpiter en acuario. Nos adentramos de forma progresiva en la era de Acuario que simboliza el futuro, lo nuevo.

Un nuevo ciclo de la humanidad está arrancando…con posibles escenarios distintos:

• La energía acuariana en su más alta vibración sintoniza con una nueva humanidad despierta y consciente en la cual prevalece lo mental, la inteligencia y la unión de los seres. Acuario al ser un signo mental apela al desapego emocional y a la objetividad para priorizar una mayor integración social.

• No obstante, como cada signo, acuario también tiene un lado oscuro cuando se usa su energía de forma no consciente: un exceso de desapego y frialdad emocional puede llevarnos hacia una sociedad extremadamente digitalizada y robotizada en la cual la inteligencia artificial rige nuestras vidas.

¿Qué podemos hacer? Ante todo acuario es un signo de co-creación y cada uno de nosotros tiene la posibilidad de aportar su semilla para contribuir al despertar de la nueva consciencia de la humanidad.

Es el momento de ser geniales, creativos y de romper con el pasado. Es el momento de atrevernos a hacer lo que vibra en nuestros corazones. Es el momento de ser auténticos. Ya que nos hemos dado cuenta en este año 2020 de que no tenemos control de nada. ¿Así, que tenemos que perder? ¿Por qué no atrevernos a alcanzar nuestro potencial? Ya que al fin y al cabo cuando más brillemos, más brillará nuestro entorno y beneficiará al resto de la humanidad… efecto domino…